Entrevista con el doctor, Samuel Celis Rueda, autor de “Mi Nombre es Colombia”


Autor: Samuel Celis Rueda

Por María del Carmen Sosa Sierra
¡Hola amigos de María Publishing! Después de algunos días de aparente inactividad, por razones totalmente ajenas a nuestra voluntad y deseos de querer que este espacio en la red siga permitiéndonos desarrollar este proyecto cultural y literario, como una forma de expandir nuestros horizontes y corazones a la vida y la fraternidad con los ciudadanos del mundo global; tengo el gusto de presentarles a una persona muy especial para mí, porque lo considero mi amigo, además, creo que es dueño de una historia de vida que él mismo plasma en su libro como un testimonio de que aún en las peores circunstancias de nuestro existir, se pueden hallar tesoros y buenos motivos para vivir a plenitud y reconciliarnos con nosotros mismos, con aquellos a los que amamos y con quienes nos rodean, incluyendo a nuestros enemigos.

Como les comenté anteriormente, Mi Nombre es Colombia, cuyo autor es Samuel Celis Rueda, no es una historia de la fantasía, lo cual es muy valido como recurso literario, sino que se trata de una historia de la vida real cuyo trasfondo va más allá de una simple anécdota, es la historia de un hombre que se enfrenta a la tragedia, al dolor, a la mentira, la difamación, y a la desesperanza, pero él recibe fuerzas de lo más profundo de su corazón y se levanta tal como lo haría un valiente que no es valiente, sino a través de su dolor y de sus heridas.

Posteriormente, Samuel nos ofrece estas heridas sanadas ya, para mostrarnos que en el dolor , podemos hallar el perdón; y con el perdón, la vida misma y la paz de espíritu.

Cuando hablaba con Samuel, recordé unas palabras que había leído hacia mucho tiempo en las Escrituras y se las ofrecí en aquel momento en que conversamos y hoy, las retomo como un homenaje a Colombia, una tierra molida por las heridas de la guerra y muchos años de conflictos internos. Estas palabras pueden ser halladas en el libro de Job 11:16-19[1].

Ciertamente olvidarás tus pesares, o los recordarás como el agua que pasó.
Tu vida será más radiante que el sol de mediodía, y la oscuridad será como el amanecer.
Vivirás tranquilo, porque hay esperanza; estarás protegido y dormirás confiado.
Descansarás sin temer a nadie, y muchos querrán ganarse tu favor.

Veamos qué dijo Samuel Celis Rueda en la entrevista a María Publishing.

“Samuel es un doble placer para mí, presentarte en la sección de entrevista a escritores de María Publishing. Y digo que es un doble placer porque en primer lugar, eres el primer escritor colombiano que acude a este set y en segundo lugar, porque tú historia es algo digno de contar a la audiencia en Colombia y el mundo entero”.

1. Samuel me encantaría que le contaras a los seguidores de María Publishing, quién eres y a qué te dedicas en la actualidad.

-Antes que nada, muchas gracias a ti por la oportunidad que me das de compartir con tu público y por la posibilidad de dar a conocer mi libro, que es mi historia y mi mensaje.  Contestando a tu pregunta.  Samuel Celis es un hombre común y corriente, que labró su vida alrededor de lo que se nos impone como normal en la sociedad, pero que por las circunstancias que se narran en el libro, se convirtió en un padre que lucha por recuperar a sus hijas.  Actualmente, distribuyo mi tiempo entre mi profesión como cirujano oral y las actividades que se desarrollan alrededor del libro, charlas y seminarios. 

2.   Mi Nombre es Colombia, es el libro que acabas de publicar en síntesis de qué trata este libro.
-Es el relato de un hombre que lucha por no perder sus derechos como padre en Chile después de su separación, donde como en muchas sociedades, el papel del padre queda relegado y de alguna manera, sometido a las decisiones que se toman a través de los tribunales de familia.  Esta lucha toma un giro inesperado, cuando de manera maliciosa mi ex – señora me acusa falsamente de haber abusado sexualmente de mis hijas, lo que me llevó a una cárcel en Chile.  El libro relata también la vida dentro de la cárcel y el señalamiento social que sufre una persona al ser acusada y encarcelada sin razón.  Pero es también, una radiografía a un sistema de justicia contaminado, cuando se vale de falsos testigos, omisión y ocultamiento de pruebas y/o manipulación y presentación de otras falsas en su búsqueda por alcanzar un fin.  Fue todo esto, lo que finalmente me dio la libertad y me permitió ser absuelto de todos los cargos que se imputaran y que finalmente narro en el libro.    

3. ¿De dónde surge la idea de escribir Mi nombre es Colombia?
-De la necesidad de que mis hijas conocieran la verdad y mi deseo sincero de despertar conciencia en otros, del daño que causamos a nuestros hijos cuando en medio de nuestra soberbia, los exponemos en nuestras disputas de adultos.

4. ¿Quién era Samuel Celis antes del suceso que te ocurrió en Chile?
-Como te dije anteriormente, era un hombre común y corriente que escapando de la violencia en Colombia y buscando un mejor futuro para mis hijas, decidí migrar a Chile donde desarrollé mi profesión y donde viví la vida normal que vive cualquier persona trabajadora, hasta que se presentaron los eventos que menciono en el libro. 

5. ¿Samuel, por qué alguien como tú, un profesional en medicina, buen esposo y padre, podría enfrentar una acusación cómo esta?
-Durante la guerra sin cuartel que se desarrolló durante muchos años después de la separación, yo logré el cuidado personal de mi hija mayor por una situación muy especial que relato en el libro.  Un año y medio después de vivir con ella, los mismos tribunales me retiran el cuidado de mi hija y antes de que yo interponga una nueva medida de protección, mi ex – señora me aparta astuta y definitivamente del camino de mis hijas con esta acusación. 

6. Sin ánimo de amarillismos y de revivir este episodio tan difícil en tu vida: qué fue lo más difícil que viviste en esa cárcel, acusado de violación y lejos de tu familia.
-Además de estar en la cárcel por una falsa acusación y de saber que definitivamente mi ex – señora me había separado de mis hijas, saber los vejámenes a los que se tenía que someter mi madre para poderme visitar, el dolor que cargaba mi familia estando lejos y sobrevivir día a día en un ambiente en el que la consigna es muerte a los violadores.

7.    Me surge el interrogante de saber qué tan poderoso es todavía, la imagen de Colombia en el extranjero como una tierra fértil para el narcotráfico, ya que este fue el ardid que usaste para salvar tu vida.
-El estigma del narcotráfico desafortunadamente el día de hoy aun nos acompaña en el extranjero.  Éste se alimenta además, de las series, producciones, novelas realizadas en Colombia que exportamos al exterior y donde por lo general el tema central es la violencia y el narcotráfico.  Por lo tanto, no fue difícil crear un personaje que no es desconocido ni producto de la ficción, y menos en un ambiente delincuencial como es el de una cárcel.


8.    ¿Son inhumanos los sistemas carcelarios del mundo, aún para alguien que es inocente de los delitos que se impugnan?
-Como relaté en el libro y apunto de manera textual  “(…) En un país donde el estado de derecho mantiene la presunción de inocencia de cualquier individuo antes de investigarlo, comprobar que es culpable, condenarlo y enviarlo a la cárcel, en Chile, yo debía hacer el recorrido a la inversa, es decir, pasar primero por la cárcel para poder comprobar mi inocencia (…)”. 

9.    ¿Cómo es el trato para una persona acusada como tú en una cárcel extranjera? ¿Cómo es el trato para un supuesto “capo del narcotráfico colombiano” como lo que aparentaste ser en Chile?
-En la cárcel todos son tratados como delincuentes.  A los ojos de los demás internos, yo era un preso más que tenía que ganarse un lugar en la intrincada trama social existente y hacerme pasar por narcotraficante me ofreció una careta que me brindó respeto, por lo que significaba dicho cartel y de esa manera evitar las consecuencias de una acusación tan condenada entre los presos, como es la del abuso sexual. 

10. ¿Quién es ese personaje que retoma tu caso y decide declararte inocente?
-Un magistrado de apellidos Silva Opazo, quien desempeñó el verdadero papel que debe ejercer un servidor público imparcial y justo, al escuchar y ver cada una de las pruebas que presentaban tanto el ente acusador como la defensa y que terminaron por derrumbar el caso presentado.

11. ¿Qué sucedió luego que saliste de la cárcel en Chile?
-Yo creí que podía retomar mi vida normal, pero me di cuenta que en el ambiente profesional y laboral mi nombre había sido manchado y el señalamiento social era una certeza.  Mi dignidad había sido pisoteada y sin posibilidades de trabajar y ante un panorama incierto, caí en depresión la que se agravó con un cuadro de alcoholismo que me llevó a un intento de suicidio.

12. ¿Cuesta más recuperarse después de un proceso tan difícil?
-Creo, basado en mi experiencia, que cualquier proceso de vida es fácilmente recuperable cuando le abrimos nuestro corazón a Dios y dejamos que sea Él quien tome las decisiones y se encargue de ayudarnos.  Cuando nos encontramos alejados de Él, no vemos las respuestas.

13. Cuando uno sufre algunas dificultades, puede encontrar que algunas personas con que uno contaba, nos abandonan, cómo se lidia con esto.

-Siendo sincero, fueron muy pocas las personas que me dieron la espalda y muchas más las que me tendieron un brazo de apoyo.  Sin embargo, aquellas que se alejaron me causaron dolor, pero rápidamente me di cuenta que vale la pena estar con quienes se merecen y no sufrir por quien no lo merece.

14. ¿Cómo lidiar con la frustración de ser acusado injustamente, de ver casi la vida de uno echada al traste…Cómo lidiar con el dolor?

Aprendiendo a ver el vaso medio lleno y no medio vacío.  Aprendiendo que de una crisis puede surgir una gran oportunidad y especialmente cambiando las prioridades de vida.  Anteriormente, creía que la felicidad era lo que nos determinaba la sociedad; los bienes materiales, los logros profesionales, el reconocimiento, pero esa felicidad es efímera.  ¿Qué queda después de todo eso?  Por eso mi prioridad ahora no es alcanzar esa felicidad, sino vivir una vida con tranquilidad y paz interior y que lo demás llegue como consecuencia y no como un propósito.

15. ¿Es difícil perdonar? ¿Cómo se puede perdonar y por qué hacerlo para vivir saludablemente?
-Es difícil perdonar cuando dejamos que sea la voz del ego la que determine nuestras acciones.  Cuando acallamos esa voz y escuchamos la voz del espíritu santo, nuestra verdadera voz interior o como la quieras llamar, perdonar se convierte en un estilo de vida.  Porque todos los días debemos perdonar.  Por eso considero que “la herramienta más poderosa es el perdón”.

16. ¿Samuel cómo podría ayudar tu historia a quienes sufren injusticias y pasan por dificultades para que alguien crea su historia?
-De alguna manera, mi historia toca el corazón de otros al decirles que no están solos.  Que todos tenemos problemas, pero lo más importante que podemos salir a flote y victoriosos a pesar de sentir que tenemos el lodo sobre nuestros ojos.  Mi libro, que es además mi historia, abre puertas de reflexión alrededor de otros temas para que aprendamos a valorar las pequeñas cosas de la vida que a veces pasamos por alto.

17. ¿Cómo ha sido el proceso de reconciliación con tus hijas principalmente, ya que a ellas les dedicas el libro?
-Tengo la fe y la serenidad para esperar los tiempos que Dios me tiene preparado para el momento en que pueda decirles nuevamente cuanto las amo.  Cuando conozcan la verdad detrás de la manipulación, yo estaré esperándolas con los brazos abiertos y mi corazón, alma y espíritu dispuesto para ellas. 

18. ¿Qué futuros proyectos tienes para contarnos, Samuel?
Además de estar desarrollando charlas y seminarios de contenido social, estamos evaluando varios proyectos para llevar MI NOMBRE ES COLOMBIA a la pantalla.  Antes de finalizar el año 2013 espero también poder ofrecer mi segundo libro y también mi segunda entrevista a María Publishing.

19. ¿Samuel qué mensaje final tienes acerca de la reconciliación en Colombia?
-Colombia es un país con heridas abiertas y muy grandes.  Hablamos de reconciliación cuando nos referimos a esa paz que tanto anhelamos y la posibilidad de estrechar las manos de nuestros enemigos.  Sin embargo, aunque existe un gran espíritu de paz de parte de todos los colombianos que estamos cansados con la guerra, ésta no va a llegar solamente con abandonar las armas, si seguimos viendo desangrar al país por la corrupción, que genera quizá más y más desigualdad y una inmensa injusticia social.

Samuel muchas gracias por contarnos tu historia que al final es una historia de vida, de la cual podríamos sacar muchas enseñanzas para la reconciliación y llevar una vida plena. También, me sentí complacida de tener mi primer compatriota en este set de entrevistas. Por supuesto que en María Publishing estaremos esperando esa segunda entrevista que nos darás cando salga “Mi Nombre es Colombia” en pantalla.

Samuel, te deseo muchas bendiciones en tu vida personal y profesional. Que el Dios Todopoderoso te siga guiando y ayudándote a sembrar semillas de perdón.

María Publishing.

Barranquilla, Mayo 17 de 2013


Fuente: Entrevista a Samuel Celis Rueda
Fotografía: Samuel Celis Rueda



[1] Santa Biblia (NVI) Nueva versión Internacional de la Biblia.

Comentarios

  1. Muchas gracias Samuel y estoy agradecida por tu presencia y participación activa en este proyecto. Tu historia es un testimonio maravilloso que sé que permitirá que muchas personas alcancen el perdón y la reconciliación. Colombia tiene un vivo ejemplo en ti y te deseo lo mejor del mundo.

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  2. Se convirtió en costumbre esta clase de denuncias ..

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